Juan José Enríquez: "Quiero destacar el enorme esfuerzo que están realizando los economistas para mantener un servicio de calidad en estas circunstanc

15 abril 2020 Artículos
El Decano presidente aborda cuestiones relativas a la economía y a la organización colegial
Con motivo del Estado de Alarma decretado por el Gobierno, el decano del Colegio analiza cómo se han adaptado los servicios colegiales y las medidas económicas adoptadas por las distintas instituciones para paliar las consecuencias de COVID-19

¿Qué medidas se han tomado en el COEV respecto al coronavirus y el estado de alarma?
Una vez declarado el Estado de alarma, cerramos la sede para evitar contagios y proteger tanto a los trabajadores como a los colegiados. También suspendimos las actividades presenciales y nos preparamos para poder prestar nuestros servicios de forma telemática. En este sentido, se ha realizado un esfuerzo para poder acceder íntegramente a los ordenadores de la sede como si estuviéramos allí y hemos derivado el teléfono a los responsables de los distintos departamentos para que las dudas y peticiones de los colegiados sean atendidas. Además, se ha reorganizado la página web www.coev.com para que la información que más interés genera a los colegiados, según nos han trasladado, sea destacada y para enlazar directamente con la web del Consejo General de Economistas https://economistas.es/ con el fin de tener acceso al consultorio "los economistas responden", tan útil cuando la normativa cambia cada día, así como, a las últimas noticias sobre el coronavirus y su incidencia en el trabajo de los economistas.

¿Con qué servicios cuenta el colegiado durante la cuarentena?
Además de atender y dar respuesta a todas las cuestiones que se nos plantean por las distintas vías comentadas, estamos también desarrollando acciones formativas online, todas ellas gratuitas para los colegiados, trasladando las últimas novedades, diseñando webinars y píldoras formativas sobre herramientas y habilidades que puedan ayudar a los economistas durante el Estado de Alarma, para lo que hemos contado con la colaboración desinteresada de profesionales con los que el Colegio mantiene ya una larga relación. Se ha elaborado también un nuevo diseño de Boletín de Formación más atractivo en el que se destacan estos nuevos formatos docentes. Así, hemos potenciado la formación sobre herramientas informáticas y teletrabajo, tan necesarias en esta situación. Los trabajadores del Colegio están en permanente contacto compartiendo las dudas y peticiones que nos trasladan los compañeros y priorizando estas demandas desde el punto de vista informativo. Para atender esta necesidad, se están publicando cada dos o tres días Boletines Electrónicos Especiales centrados en la problemática COVID-19, que pretenden unificar, ordenar y simplificar para su consulta, la ingente información que se está generando en este periodo desde los distintos organismos e instituciones. Quiero destacar la información procedente del Consejo General de Economistas y de sus distintos Registros, facilitando modelos y procedimientos...en fin, intentando ayudar al economista en estos momentos difíciles a seguir prestando el mejor servicio a su empresa o a sus clientes. En este sentido, quiero subrayar el enorme esfuerzo que están realizando todos los compañeros para mantener este servicio de alta calidad a sus clientes, en circunstancias muy complicadas, no sólo por el riesgo de contagio y las limitaciones de movilidad, sino por la necesidad de analizar y aplicar las nuevas medidas en tiempo record.

¿Qué procedimiento se va a seguir respecto a la Asamblea General convocada para finales de marzo y que ha sido necesario aplazar?
Lógicamente, por efecto del coronavirus y el Estado de Alarma, ha sido necesario anular la convocatoria, que esaba prevista para el 31 de marzo. Por el momento, queda aplazada sin fecha a la espera de que pueda normalizarse la situación y se proceda a una nueva convocatoria.

¿Cree que esta crisis puede servir para mejorar algunas funcionalidades del Colegio?
Estoy seguro. Es evidente que todas las crisis, y más una de este tipo, tienen efectos negativos pero también sirven de aprendizaje. En este caso, nos hemos adaptado plenamente a la fórmula del teletrabajo, que nunca se había experimentado en nuestro Colegio. Hemos aplicado nuevos métodos de trabajo y de comunicación y, según se nos traslada, la satisfacción de los colegiados es bastante alta con el resultado alcanzado.

¿Qué herramientas de comunicación se están utilizando para dirigirse a los colegiados durante esta crisis? Estamos utilizando todas las vías a nuestra disposición para comunicarnos con los colegiados. La página web, el correo electrónico coev@coev.com, el teléfono, las redes sociales y los boletines de información y formación. Esta misma semana convocamos las comisiones sectoriales mediante plataforma on line, para que de esta forma los compañeros de las distintas especialidades puedan reunirse y comentar la situación, experiencias y soluciones.

¿Han habilitado algún buzón especial para atender dudas y preguntas sobre el Colegio?
Ya lo teníamos establecido en la propia web y a través del correo electrónico coev@coev.com, y contamos con una persona del Colegio encargada de atender las dudas, preguntas y sugerencias y derivarlas al departamento correspondiente.

¿Considera que las medidas económicas aprobadas por el Gobierno para paliar las consecuencias del estado de alarma son acertadas, excesivas o insuficientes?
Creo que son necesarias pero insuficientes. Es cierto que todas ellas eran adecuadas pero algunas no se han aplicado adecuadamente. Por ejemplo, la habilitación de avales para que el ritmo de financiación bancaria no se detenga está funcionando razonablemente bien. Sin embargo, a la hora de agilizar el sistema de los ERTEs, falta un desarrollo reglamentario que establezca un procedimiento común en todas las CCAA y flexibilizar este mecanismo para las causas de fuerza mayor. En muchos territorios se está considerando que sólo las empresas de sectores que forman parte del anexo que incluye el Decreto se pueden acoger a este sistema, cuando lo cierto es que, en otros muchos sectores, hay empresas que están viéndose obligadas a parar por causas de fuerza mayor. Las últimas medidas, como la prohibición del despido por causas objetivas, o el permiso remunerado a cargo exclusivamente del empleador son más polémicas, porque parece que el Estado no se está dando cuenta de que esta crisis la superaremos con el esfuerzo de todos, no solamente de los empresarios, sobre todo si tenemos en cuenta que el 95 % son pequeñas empresas.

¿Qué otras medidas recomendaría?
Además de lo señalado, respecto a los pagos tributarios, no se han aplazado las fechas de declaración y, en el caso de las pymes, tan solo se ha extendido la posibilidad de aplazamientos automáticos a otros tributos, sin ni siquiera aumentar los importes máximos. Es decir, en estas circunstancias tan extraordinarias nos encontramos práctiamente con las mismas facilidades que antes de la crisis. Actualmente nos encontramos con muchos casos en los que existe incluso una imposibilidad material de cumplir con esta obligación por falta de medios. Creo que es necesario que se cumplan estos plazos por parte de las empresas que estén en condiciones de cumplirlo, pero para el resto, que son la gran mayoría, debe articularse un aplazamiento sin ningún tipo de recargo. Además, como comentaba, es necesario que el coste de la crisis sea asumido por todos. Echo en falta mayor generosidad y arrojo por parte del Estado. No se puede cargar a las PYMES con el peso de la crisis porque muchas no lo soportarán, es necesario que asumamos el coste entre todos y todos lo pagaremos en el futuro si conseguimos que la economía funcione.

¿Considera, como se viene diciendo desde algunas instancias, que el autónomo es el gran olvidado de estas medidas? No creo que haya sido completamente olvidado porque en el Decreto existen algunas medidas relacionadas con el aplazamiento del pago o la concesión de una prestación extraordinaria. Los problemas que nos encontramos son nuevamente los mismos. Las dificultades, en muchos casos, para la tramitación de estas declaraciones por falta de medios y los problemas y retrasos a la hora de justificar las caídas de ingresos que permiten optar a la prestación. Los autónomos que no puedan ir por fuerza mayor van a tener que esperar, como mínimo, a finales de abril para poder acogerse y mientras tanto tendrán que seguir pagando las cuotas de Autónomos.

¿Cuáles pueden ser los efectos más graves de esta crisis? ¿Qué medidas urgentes conviene tomar una vez superado el estado de alarma?
A diferencia de crisis anteriores, nos encontramos en este caso con un motivo exógeno a la economía, como to- dos sabemos. Lo que es fundamental evitar es que esta situación coyuntural tenga efectos estructurales. Por ello, es necesario aplicar eficazmente las medidas de urgencia y hacer el máximo esfuerzo para mantener las estructuras productivas y los empleos. Apelo, nuevamente, al Estado para que adopte con mayor decisión y valentía las medidas que necesitamos para ello. Si lo conseguimos, cuando finalice la crisis sanitaria, po- dremos arrancar de nuevo la estructura productiva, aunque con dificultad, y empezar a recuperar lo perdido en un tiem- po razonable. Si no es así, tendremos graves problemas durante mucho tiempo.

¿Qué papel deben jugar la UE y el BCE durante esta crisis?
Dada la magnitud del esfuerzo fiscal necesario para poner en marcha las medidas económicas anunciadas y las que deben anunciarse, el Estado va a necesitar obtener un ingreso extraordinario muy importante por la vía de la deuda pública. Para ello, es obligatorio que la UE se comprometa decididamente a flexibilizar esta vía de ingresos. Además, es urgente valorar si es el momento de poner en marcha el anunciado programa de eurobonos para toda la UE que facilitará la financiación, no sólo de los países más afectados por ahora como España o Italia, sino de todos sus países miembros, que en mayor o menor medida, se van a ver afectados.

El Consejo General de Economistas ha recomendado recientemente medidas, como el aplazamiento del pago de obligaciones tributarias y con la Seguridad Social de las empresas. ¿Está de acuerdo?
Evidentemente, desde el COEV, como desde otros colegios, estamos en plena sintonía con el Consejo General de Economistas, del que somos parte, en la idea de solicitar a la administración estatal que atienda a medidas que consideramos ineludibles como los aplazamientos en los plazos de declaración, la suspensión de la cotización de los autónomos que se encuentran en una situación complicada y, como he comentado, la necesidad de flexibilizar los supuestos de fuerza mayor.

¿Considera que habría que incrementar las medidas relacionadas con el crédito a pequeñas y medianas empresas?
Según las noticias de las que disponemos, el sistema de avales está funcionando razonablemente bien y las entidades financieras están actuando con bastante agilidad en la renovación de las líneas de crédito y la concesión de préstamos en condiciones favorables. Creemos que las entidades financieras han respondido con rapidez a la crisis, por lo que es una de las medidas que está funcionando mejor. No obstante es una impresión inicial, veremos con algo de tiempo si efectivamente está funcionando correctamente. En todo caso quiero destacar que esta medida es también clave para la situación: no puede cerrarse el grifo del crédito como ocurrió en 2008. Por ese motivo apoyamos totalmente la aprobación de la línea de avales de 100.000 M de euros.