Alejandra Kindelán analiza los nuevos retos a los que se enfrenta el sector bancario
El Consejo General de Economistas en su ciclo "Lideres en directo" contó con la presencia de Alejandra Kindelán, Presidenta y Consejera Delegada de la Asociación Española de la Banca (AEB) y presidenta de la Fundación AEB. Además, es vicepresidenta ejecutiva en OECD y miembro del Instituto de Estudios Económicos (IEE) del Patronato de la Fundación de Estudios Financieros (FEF) y del Observatorio de la Escuela de Organización Industrial (EOI).
Alejandra Kindelán aseguró al inicio de su intervención que "vivimos tiempos de cambio en los que la capacidad de resiliencia y de adaptarse son fundamentales para hacer frente a los retos que tenemos". En concreto, se refirió a los cambios que están condicionando el entorno como la competencia, los cambios económicos y la sensibilidad social, "puesto que se espera más de los bancos".
En este sentido afirmó que "hemos pasado a vivir otra vez en un entorno con inflación y con tipos de interés subiendo, cuando llevábamos una década con tipos de interés en cero o en negativo" y "esto ya está cambiando, estamos viendo un repunte de manera que la inflación está siendo más persistente y esto se debe a la ruptura de las cadenas de valor que vimos después de la pandemia, la recuperación de la demanda y los cambios en los hábitos de trabajo, en el mercado laboral, la invasión rusa de Ucrania y el impacto que ha tenido sobre el mercado de las materias primas y la energía". Ante este repunte de precios los bancos centrales han reaccionado subiendo los tipos de interés, porque "el mandato que tienen es frenar y controlar la inflación y esa es la herramienta que tienen", aseguró.
Alejandra Kindelán aseguró que "en Europa está en torno al 4% y en EE. UU, un 5, 25%; unos niveles que ya hemos visto en el pasado. Lo que es nuevo es la velocidad de ajuste" es por ello que en materia regulatoria "lo que siempre pedimos desde el sector es tener una regulación equilibrada, ordenada y que favorezca la competitividad de nuestras empresas y de nuestros bancos".
Respecto al marco regulatorio, indicó que "nos piden más y mejor capital, requerimientos de liquidez por primera vez y un nuevo marco de gestión de crisis bancarias. Este marco regulatorio de supervisión ha llevado también a un cambio en el gobierno corporativo que se enfoca en garantizar una adecuada gestión y control, y ha incorporado cambios esenciales". Concretamente se refirió a la remuneración del sector con el objetivo de alinear las entidades y los directivos, consejeros, altos cargos y los tomadores de riesgo en las entidades "difiriendo la retribución variable, los bonos que se vinculan a la viabilidad de la entidad a largo plazo y la exigencia de que parte de esa retribución variable se page en acciones". La segunda fase radica en el proceso de idoneidad de los consejeros y directivos, "se ha reforzado ese proceso con el objetivo de garantizar que cuentan con experiencia y conocimientos para controlar esos riesgos y garantizar que hay una cierta diversidad en los perfiles de los consejeros porque al sector se le está solicitando un esfuerzo de transparencia en la toma de las decisiones", aseguró.
Respecto a la competencia afirmó que "nos encanta, porque, de hecho, tenemos bancos muy competitivos que se han internacionalizada, pero pedimos mismas reglas para todos porque vivimos muchos cambios en la economía digital donde el consentimiento del cliente se convierte en esencial para poder ofrecer un servicio más personalizado" y por ello "queremos un marco regulatorio igualitario porque nos están pidiendo más datos al sector bancario que a otros sectores".
Por otro lado, otro de los cambios que están afectando a la banca es la sensibilidad social que se ha convertido en una exigencia de la sociedad hacia las empresas y los bancos. Por este motivo, "debemos responsabilizarnos de determinados retos que nos transcienden como sectores pero que son preocupaciones de los ciudadanos como el cambio climático, la desigualdad, la exclusión y la corresponsabilidad porque esta sociedad demanda servicios más personalizados, que estemos pendientes 24/7, que se puedan resolver numerosas cuestiones y que ofrezcamos un servicio multicanal tanto en servicios digitales como presenciales o telefónicos".
No obstante, Alejandra Kindelán mostró el convencimiento de que el sector bancario está fuerte para enfrentarse a estos retos. La clave es "el control de gestión de los riesgos y en concreto, una gestión del tipo de interés que es algo que tiene que gestionar la banca", pero "los bancos españoles han demostrado tener muy interiorizada una cultura de gestión de riesgos que se puso en práctica durante muchos años y que es lo que permite afrontar estos retos con confianza. Los años de tipos de intereses cero o negativo han sido un buen campo de prueba", concluyó